Mediante un decreto publicado este martes, la gobernadora autorizó un incremento de partidas presupuestarias solicitadas por Jefatura de Gabinete, con destino al Autódromo. Se trata de $79 millones para “atender sus actuales exigencias operativas”, de los cuales $75,5 millones se afectan a “servicios varios”, sin precisar su destino específico.
Semejante reasignación presupuestaria, autorizada mediante el decreto 852/2017 publicado este martes, no tiene una finalidad concreta, o al menos no se la explicita. La norma simplemente expresa que el aumento de créditos presupuestarios para el Autódromo se realiza a solicitud de Jefatura de Gabinete, con el objeto de “atender sus actuales exigencias operativas” pero “sin entrar a considerar la aplicación final de los créditos, responsabilidad exclusiva y excluyente del contratante”.
Asimismo, en la planilla anexa al decreto se menciona, con una vaguedad extrema, que de esos $79 millones, $75,5 se afectarán a “servicios varios”, lo que daría lugar a la utilización discrecional de ese dinero, más aún cuando se acercan las elecciones.
El resto, es decir, $3,5 millones, se utilizaría para la adquisición de “productos de papel, cartón e impresos varios”; “combustibles y lubricantes” y “otros bienes de consumo varios”.
Lo curioso, además, es que otro decreto, el 853/2017, publicado el mismo día, autoriza un aumento de créditos presupuestarios también para el Autódromo, aunque en este caso aclara que los $24 millones solicitados se utilizarán para refacciones y reparaciones en el sector boxes.