SOLO LA EDUCACIÓN MATA LA CORRUPCIÓN

Es por ello que la gran política del Dr. Gerardo Zamora y de la Sra. Gobernadora, Dra. Claudia Ledesma Abdala de Zamora, es “MATAR A LA EDUCACION PARA QUE SIGA REINANDO LA CORRUPCION”.

En la teoría el nuevo Sistema Provincial de Santiago del Estero, donde la corrupción echó raíces. En la práctica es facial comprobarlo con solo leer las grandes obras y las adjudicaciones con un solo oferente que en reiteradas oportunidades uno los va leyendo en el Boletín Oficial, nos conduce inexorablemente a reconocer sin reservas y con el pesimismos a cuesta que la corrupción se enquisto en el Poder Político actual hasta la medula.
Honestamente la cruzada que enarbola ahora el matrimonio gobernante, la han llevado a cabo ya sus antecesores (ayer Gerardo, hoy Claudia) y los resultados están a la vista.
La llamada Renovación Moral que esgrimió Gerardo Zamora al principio de su Gestión de Gobierno, allá por el año 2.005, que implicó también la reforma constitucional, estamos viendo y viviendo hoy, la etapa siniestra de la corrupción, y sufriendo como sus consecuencias, conlleva a acrecentar la pobreza extrema en nuestra provincia.
La corrupción es como la mala hierba, o se corta de raíz o nunca muere y hay que decirlo con claridad.
Hemos caído, en el circulo vicioso de la corrupción que está compuesto por la desigualdad y la desconfianza y aderezado por la ambición.
Bien lo decía hace unos días en México, Eric Uslaner, uno de los más reconocidos estudiosos de la corrupción en el mundo: ¿la desigualdad social aumenta la corrupción y ésta, a su vez, hace más amplia la brecha entre ricos y pobres?. Un sistema nacional anticorrupción puede no servir de nada, si no se combaten las causas profundas de este mal?
Lo explicó mejor hace unos días el Papa Francisco: ¿cuando el dinero se convierte en un ídolo impone sus formas de conducta al hombre?, arruinándolo y haciéndolo ¿Quizás un siervo?, mientras que cuando se pone al servicio de la vida ¿no es el capital que manda sobre los hombres sino los hombres sobre el capital?.
A este dinero mal habido, sucio, injusto, ¿FRUTO DE CORRUPCIÓN LO LLAMÓ FRANCISCO EL ESTIÉRCOL DEL DIABLO?.
La mala hierba de la corrupción vivirá por décadas en nuestro Santiago Querido, viviremos su muerte que será lenta.
Pero siempre se puede, ahora hay que pergeñar las bases para su desaparición total en décadas posteriores.
El antídoto, no hay otro, se llama educación porqué solo esta genera igualdad y entre tanto el tema de castigos ejemplares, y un trabajo de los medios de campañas anticorrupción con mensajes poderosos sería un buen inicio. Caso contrario miren lo que pasa en el “Declarado Monumento Histórico” del Colegio “Del Centenario”, LA RUINA TOTAL.