Análisis de los candidatos del frente civico a las intendencias

Por: U.H

Qué sugerente y extraño resulta para los santiagueños ver las presentaciones y lanzamientos de los candidatos del Frente Cívico. Son realmente imágenes pobres: Gerardo Zamora, el candidato puesto a dedo, algunos ignotos aspirantes a concejales y como marco de extras, un grupo de gente con menos entusiasmo y fervor que los brasileños después del quinto gol de Alemania.

Podríamos reproducir algunas de las teorías que los santiagueños ensayan para explicar este fenómeno, pero ninguna sería concluyente ni totalmente satisfactoria. Unos hablan de apatía ciudadana ante la alevosa evidencia de ver que los “candidatos” son sólo títeres ineptos pero con algo de buena imagen, puestos para intentar ganar las intendencias y luego ceder el control total de esos municipios a Gerardo Zamora, quien poligobernaría desde la casa de gobierno. Otros hablan de rebeldía popular por ver que quienes se presentan son en realidad candidatos testimoniales, simbólicos como es el caso de nuestra actual gobernadora Claudia Ledesma y que una vez logrado el triunfo, esos “candidatos” se correrían para ceder el lugar a dirigentes de fuste (calaña) designados por Zamora, pero que permanecerían en el cargo bajo su estricta mirada y seguimiento. Pero la teoría que más suena es la que indica que al haberse producido una ruptura con el secretario general de UPCN Gerardo Montenegro, el Frente Cívico habría perdido  “bullanguerismo”, colorido, alegría, música y mucha presencia en sus actos, por lo cual a Gerardo Zamora le estaría resultando difícil poblar tribunas y estadios, lo que lo obligaría a realizar modestos actos de lanzamiento en los que la ausencia de encendidos militantes de tablón es pobremente compensada con la presencia de familiares, más entusiasmados por la prosperidad que les pueda traer la gestión del pariente candidato que el progreso y los beneficios colectivos que pudieran venir.

La única excepción se da en la ciudad de La Banda, lugar donde todos los cañones están apuntados, allí sí se moviliza, se arrea y arman actos grandilocuentes con la intensión de convertir a esa ciudad, en una más en el listado coleccionable del feudo según el pensamiento zamoriano del desarrollo de la política, quieren una conquista más, quieren llenar el álbum, completar el mapa, pero aquí también se equivocan ¿qué pasaría si la Nassif hace un paso al costado?, pues sería acaparada por la familia gobernante y los Ledesma Abdala-Patiño o como quiera llamarles, tomarían el verdadero poder por interpósitas personas llegando de esta manera a lograr su cometido de manera subrepticia, ¿LA BANDA SERÍA DE LOS LEDESMA PATIÑO?.

Sabido es que un lugar inexpugnable para el Frente Cívico es el territorio de Pinto ya que Emilio Rached es invencible en su tierra, pero van a operar y quizás hasta intenten fraguar, quieren un mapa santiagueño pintado de celeste, rojo y blanco, lo que no se imaginan es que cada día que pasa lo pergeñado se tornara más difícil. Quieren lograr el último bastión, pero tanto interés ponen en él, que descuidan a un peronista que de presentarse podría ganar la capital. Y los odios personales del senador podrían llevarlo a mover mal y terminar la jugada, sacrificando un ejército para salvar un pelotón.