Lo que antes sirvió al gobierno para lograr adhesión política, ahora cual boomerang, vuelve en su contra.
El pueblo de la ciudad Capital, aquel histórico insobornable soberano es artífice de la epopeya. Con apatía y rebeldía sin precedente demuestra en todas las encuestas oficiales y privadas un rotundo rechazo a todos los candidatos ungidos por el oficialismo gobernante para regir su destino.
Muy a pesar del optimismo que desde el gobierno pretenden transmitir a la ciudadanía, la preocupación hoy los desvela.
Del mismo modo que el kirchnerismo nacional pende su existencia en el Senado al "voto umbilical" de Ana María Corradi de Bertrán. El gobierno de Gerardo Zamora y el destino de "sus funcionarios" muchos de los cuales gravemente sospechados de corrupción administrativa y enriquecimientos ilícitos; dependen del voto que puedan o NO renovarles los vecinos de la ciudad Capital.
Zamora es consciente de esta situación y de los errores cometidos. Demasiada impunidad, sumado al inmoral y hasta morboso exhibicionismos de nuevas riquezas injustificadas en sus funcionarios ha relajado el sentimiento de un pueblo. Julio Fernando Alegre es el ejemplo emblemático del modo de gobernar que hoy continua vigente en muchos de sus actuales funcionarios. Ello es una evidente verdad.
Con alto índice de independencia económica e intelectual, el futuro de su gobierno depende de los vecinos de la Capital, ese es el verdadero desafío que la hora impone. Y él bien lo sabe.
Para desgracia de su gobierno, son aquellos justamente, los que siempre fueron reacios a la dadiva del bolsín y al soborno del plan social; críticos de quienes utilizan como herramienta de lucha politica los dineros del pueblo, capitalizando electoralmente la miseria, la necesidad y hasta la ignorancia de la gente. Y en verdad, Gerardo Zamora a lo largo de su gestión con mas de 25.000 Contratos de locación de servicios, 15.000 planes sociales y una irresponsable generosidad a la hora de disponer subsidios millonarios a gremios, mutuales, sindicatos y hasta para la misma CGT. Sintetiza en su persona y gestión de gobierno, todo aquello que los vecinos de la Capital detestan.
Ninguna de las variables políticas ensayadas logra revertir el VOTO NEGATIVO de la gente. El fenómeno Alegre sigue vigente y hoy mas latente que nunca, pues Alegre comenzó hablar involucrando en sus fechorías a muchos hombres del actual gobierno. Y no lo pueden callar. Eso esconde el gobierno y el silencio periodístico lo confirma.
Sin olvidar que el Frente Cívico y Social ya no cuenta con el sello de la UCR, capitalizado hoy en manos de su más acérrimo adversario político y a quien en realidad mas teme: José Luis Zavalia.
Ese inesperado revés juridicial, obligo a Zamora en su estrategia electoral, sumar a la dadiva y al soborno para mantenerse en el poder, la FRAGMENTACION POLITICA. Pero no para capitalizar votos para su sector, por el contrario, su objetivo es DISPERSAR los votos de la oposición.
Muy pronto veremos ofertas electorales de sectores justicialistas independientes ( por fuera de Base Peronista ) o de radicales disidentes ( por fuera de la UCR ) que se presentaran a la compulsa electoral para la Intendencia de la Capital.
Serán los nuevos sectores que a modo de "colectoras inversas" mandados desde el oficialismo gobernante tendrán por objetivo colectar los votos dispersos bajo el disfraz de oposición, evitando así, su capitalización y fragmentación de la REAL OPOSICION. A quien Zamora realmente le teme.
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