MEJOR QUE UN CARDENAL?

A las siete horas declaradas que lleva en su haber, el imputado Carlos Ernesto "el gordo " Pinto, en la denominada "Mega banda de piratas del asfalto ", ayer nuevamente concurrió ante el Juez de Cuarta Nominación (Dr. Moreno) para brindar su "TERCERA" declaración. Esta última a  solicitud del propio imputado y  abogado defensor (Juez de Segunda: Tarchini Saavedra).

Fueron tres horas y media (todo un record ) donde el "gordo" desembucho de todo y contra todos. El empresario surgido en la era zamorista, cantó mejor que un cardenal, brindo detalles puntillosos de como operaba la banda, lugares precisos donde eran asaltados los camiones y, hasta los nombres de quienes serían los verdaderos "jefes y autores de los robos" y, de los comerciantes a quienes reducían las mercaderías robadas, ya sea por  encargos de "clientes" o al "boleo". Pero siempre robadas, esa era la condición.

Afirman los presentes que, el "gordo" no se guardo nada, mando a todos en "cana". Eso sí, Juro por todos los santos que no es él quien robaba camiones, como tampoco su hermano y los otros detenidos. En verdad, acuso siguiendo el concejo de su "abogado" como  Jefe de la banda a un santiagueño radicado en Buenos Aires de nombre Dariel Antonio Bellido y hasta menciono a un sobrino de este, recientemente liberado por hecho similar en la ciudad de La Banda de ser participes en los hechos.

La estrategia del "hábil declarante" como de su abogado defensor (Ramón Tarchini Saavedra, desde las penumbras), es más que evidente.

Como lo venimos anticipando "hay códigos" que la banda no respetó. Concretamente, la banda empresarial local está respondiendo a los  "aprietes"  que hacen los foráneos, exigiéndoles el pago de las mercaderías robadas, por algo más de 8 millones de Pesos. Si Uds. perdieron allá (por Santiago) no es problema nuestro, a nosotros nos pagan SI o SI, sería la exigencia de aquellos, sobre nuestros coterráneos.

Pero como nuestro empresariado están fuertemente vinculados,  política y familiarmente con jueces y políticos locales, hacen valer sus "influencias y localismo" para evitar pagar la deuda reclamada. De allí la necesidad de ahuyentarlos y desalentar sus pretensiones. Esa sería la única razón valedera que tiene la  auto incriminación que hizo ante el juez el "gordo " Pinto.

Una fuente policial bien informada, confirmo a este medio, que todas las trapisondas inventadas por los locales para no pagar aquella  deuda, traerá graves consecuencias que muy prontamente comenzaremos a ver, son varios años ( más de tres )  de vinculación "ilícita comercial" entre ellos.

Fueron, muchos los camiones, tractores, volquetas, motoniveladoras, acoplados y retroexcavadoras robadas en otras provincias a encargo de los "picaros empresarios locales, uno de ellos, hermano de un magistrado".