Un fantasma en el monte santiagueño

El monte santiagueño con sus relatos e historias pasadas, siempre estuvo entre lo mitológico y lo legendario. Hazañas, historias y vivencias  de nuestro hombre de campo, se transmitieron de generación en generación hasta nuestros días por medio de la palabra. Nunca existieron documentos ciertos de lo sobrenatural que acontece en la espesura del montes, sus historias lo fueron siempre relatadas, algunas en grado sumo recurriendo a la imaginación, pues los hechos relatados de otra manera, serían inexplicables.

En el mito, los protagonistas son seres con características especiales, sobrenaturales, que poseen fuerza, astucia, inteligencia y poder sobrenatural. Es posible diferenciar el mito de la  leyenda, porque en esta última, a pesar de poder ser un relato ficticio, con elementos incomprensibles, mágicos o sobrenaturales, los que intervienen son hombres.

Y fueron justamente un puñado de hombres amigos todos ellos quienes el pasado 20 de mayo tuvieron una experiencia hasta hoy inexplicable. Los muchachos decidieron compartir ese día una jornada de cacería, se dirigieron hasta una localidad del Dpto. San Martin ( Loreto ) donde luego de internarse  monte adentro, y bien caída la noche hicieron un campamento para comer el tradicional asadito debajo de un coposo árbol.
Entre los cuentos de cacería, relatos de vivencias anteriores y las bromas típicas del momento, uno de los muchachos decidió tomar unas fotografías para retractar ese grato momento.

Fueron muchas las fotografías logradas y, ente la gracia y las risas de las muecas cómicas de algunos, apareció la imagen de una mujer que jamás vieron. Los muchachos alzaron campamento y salieron más rápido que los flashes de la foto. Mudos y en silencio retornaron a sus hogares con la promesa de volver nunca más por esa zona.

En la fotografía se refleja nítidamente la imagen fantasmal de una mujer parada junto al árbol observando a los jóvenes cazadores. No se trata de ningún truco o defecto fotográfico, es pura realidad y la imagen queda a disposición de cualquier entendido para su análisis y estudio. El rostro de la mujer de "blanco" puede ser la misma que las leyendas santiagueñas llaman  La Sachap Maman. Deidad temida, su aparición en el monte, especialmente de noche, produce terror. Se presenta en distintas formas, tanto humanas como de animal. Su nombre quichua está compuesto de: sacha (monte), -p (posesivo de ella), mama (madre), -n (su, de ella), significa: madre del monte.

Los cientificos o medios interesados en la fotografia para su analisis, pueden contactar con nuestra redacción 0385-154181294, desde el exterior agregar codigo de Argentina 054 o bien a travez de nuestro mail: codigorojo98@hotmail.com