EL POBRE DISCURSO DEL GOBERNADOR ZAMORA

Realmente causa desagrado e indignación, el total desparpajo y desvergüenza con que el gobernador de la provincia, nutre su discurso con tantas banalidades, que indudablemente tienen origen en las falacias que la pléyade de corruptos integrantes de la plana mayor policial en sus informes. ¿Pero es tan ignorante el gobernador?¿O solo utiliza la semana de la policía para tapar todo lo irregular que esta a ojos vista por toda la comunidad?¿O solo es un discurso oportuno para la ocasión?

Intentaremos rescatar algunas apreciaciones que Zamora hizo en estos últimos días, reproducidas por los diarios pagados con propaganda oficial.

Primero, inaugura la nueva comisaría en la zona norte, para llevar seguridad a la ciudadanía, porque es un sector que ha crecido y el territorio se extiende, etc. ¿Y las otras comisarías, 7ma y 11va, por ejemplo? ¿No tienen el mismo problema? Pareciera que no.

Entrega dos motos y un vehículo automotor (camioneta) cuando en otras dependencias el personal policial (entiéndase de comisarías) acuden a los procedimientos en sus vehículos particulares, o solicitando colaboración a los remiseros que circulan por el lugar.

Segundo, menciona “mapa del delito” cuando ni siquiera sabe que es eso, nunca manejaron una real estadística, y agrega que el índice delictivo “esta por debajo de la media nacional y a bajado en el último año, pero nunca se termina de trabajar”. ¿Quién y como le armaron estos datos para su discurso? No es creíble, para nada. Y como punto cúlmine, refiere que la sensación de inseguridad no es tan grande en la provincia.

Sr. Gobernador, por favor, no confunda sensación de inseguridad con inseguridad, pues son dos cosas distintas e independientes una de otra. La inseguridad en la provincia es cada vez más alta y el índice delictivo avanza inexorable, casi de manera directamente proporcional a la real inseguridad reinante.

La corrupción policial, la muerte de los reclusos, el homicidio de Domínguez, los robos calificados de estos últimos meses, con cantidades de dinero importantes como resultado, ¿no lo reconoce? Esto ocurre por la marcada inacción de la policía, por un jefe inepto, con una plana mayor cada vez más inoperante, a la cual el rumbo se les fue de la mano hace mucho, desde que decidieron que la policía les pertenece y el personal subalterno su propiedad, de la cual pueden disponer a su antojo.

De nada sirve invertir en móviles, si no tienen personal en las comisarías, porque esos móviles nuevos irán a parar a manos de los jefes de departamento, direcciones, etc., y los “requechos y remiendos” a las comisarías, donde el personal tiene que hacer adicionales para su reparación y compra de repuestos. Esto es innegable, porque el personal de esas dependencias lo padece.

En tercer lugar, mencionó que la institución policial tiene un sistema de recambio permanente que permite un ingreso en forma totalmente abierta, democrática, con la posibilidad de realizar exámenes a todos los aspirantes”.

Eso es una verdadera falacia, una falta de respeto a la inteligencia de todos aquellos que aspiran a ingresar por “derecha”, y en realidad tienen que tener el visto bueno de los punteros políticos, entre los que están los actuales jefes y plana mayor, y el Ministro de Gobierno y su subsecretario de gobierno Silva Neder.

En cuarto lugar expresó que “aquellos que están en condiciones ascienden todos, por el tiempo transcurrido y su legajo, lo que permite que los cuadros policiales tengan la movilidad necesaria que impliquen jerarquías y premios para aquel que en la Policía vaya teniendo méritos”.

En este punto quiero decirle al Sr. Gobernador que hace tres años que ascienden los mismos, y así tenemos subcomisarios con trece años de servicio, oficiales principales con ocho años de antigüedad general, mientras que hay personal con legajos intachables, capacitación y que cumplen con todos los requisitos, postergados injustamente.

Tómese el trabajo de verificar los datos, pero hágalo Ud. o nombre asesores que no pertenezcan a la policía, y verá como se encuentra con muchísimas sorpresas.

Hace tres años que no hay junta de reclamos, justamente a propósito, para que el personal que no asciende aún estando en condiciones, no pueda expresar un justo reclamo. ¿Alguien controla eso? ¿Sabe Ud. Sr. Gobernador, que luego de pasar la lista por casa de gobierno, al volver a la jefatura con “su” visto bueno, el jefe de policía, el subjefe, el jefe de personal y otros, se encargan de hacer su propia selección, eliminando a los que ellos no quieren o consideran un estorbo a sus planes? Ese personal ¿Tiene derecho a un reclamo justo? La respuesta es NO. Ese hombre o mujer que se anime a reclamar, corre el riesgo de una implacable persecución, traslado, sanciones, etc. Nadie tiene derecho en esta institución en crisis.

Los ascensos masivos no sirven a la fuerza policial, sirven los ascensos en tiempo y forma, los que realmente corresponde, porque si no, seguirá pasando lo que ya no tiene solución: los subalternos pasaron a ser superiores jerárquicos de sus antes superiores directos. Se rompió la cadena de mando y la verticalidad, por eso esta así la policía.

En lo único en que puedo concordar con él, es cuando dijo: el policía que cumple, “está dando garantías y seguridad a los hombres honestos que son la gran mayoría”.

Exacto, son mayoría, lamentablemente los corruptos y delincuentes, que Ud. en esa frase está reconociendo que existen, son los menos, pero ocupan cargos altos y tienen impunidad. Y la mayoría es la que sostiene a la policía, a su trabajo tesonero hay que agradecer.

La mayoría de los oficiales jefes y/o superiores esta cuestionado, cuando no denunciado, por distintos hechos delictivos, o que atentan contra los derechos de los empleados policiales.

Nuestro medio dió cuenta de una denuncia de personal de Drogas Peligrosas en contra de dos superiores, uno de su propio lugar de trabajo y el otro, resulta el inefable,y aprovechador jefe del departamento Personal D-1, Comisario Mayor Juan Campos. De este personaje ya nos ocupamos en reiteradas oportunidades, pero sigue atornillado al sillón, e inclusive hace las veces de subjefe de policía, ya que el Quiroga es una figurita repetida, nadie lo tiene en cuenta. Lo que a él le conviene por cierto.

Esperemos que la justicia intervenga y proteja al denunciante, que haga valer sus derechos y aplique castigo a estos señores, que ni siquiera tienen en cuenta que este hombre carga la cruz de un hijo discapacitado. Ellos no tienen la más mínima idea del calvario que debe afrontar día a día, pero Dios le dijo “ayúdame con esta cruz”, y debe seguir adelante, solo respaldado por su familia.

Que podemos esperar de Juan Campos, si lo que hicieron él, Pato, el Director de la Escuela de Oficiales, y su hija mientras ella estuvo en la escuela de policía, no tiene perdón de Dios.

Pero como vemos, ya entró una denuncia, y le auguro otras en poco tiempo, más las que ya tiene de parte de los colegas exonerados. Vaya preparando su vida para cuando pase a ser un civil más.

El periodista Rogelio Jorge Llapur, hace unos días, cuando hubo una seguidilla de robos resonantes, desde su programa preguntaba “¿a donde está la policía, la policía profesional?¿a dónde está el jefe de policía, que no hace nada, no aparece ahora?”, entre otras expresiones.

Sin embargo, está invitado para disertar sobre el impacto de las noticias delictivas en la sociedad, en jefatura de policía, especialmente invitado por los festejos de la semana de la institución. Esto es una burla realmente.

¿Hay algún motivo para festejar realmente? La respuesta esta en la cabeza de cada lector.

Sr. Gobernador, la policía de la provincia HOY, necesita un cambio. Este modelo (¿?) ya está agotado, el personal hastiado de tanta injusticia y corrupción. No pretenda que la ciudadanía crea que estamos seguros, cuando por denunciar mataron a un empleado de Rentas. Todos somos Raúl Domínguez en este momento. Abra los ojos de una vez.

No puede JAMAS tener un Ministro de Gobierno con tantas denuncias, aparte de que se sobreentiende que para ser Ministro de un área determinada, debe tener un nivel de capacitación específica, acorde a su jurisdicción. ¿Y Neder que es? Sin palabras.

Por otra parte, un jefe de policía delirante, perseguidor, acosador y algo mas, tiene de todo, es completito, porque hasta causas delictivas tiene en su haber, pero de seguridad o policía nada.

Habla de policía profesional cuando solo posee titulo secundario, igual que el subjefe. Ambos estudiantes frustrados que nunca darán respuesta a los verdaderos problemas e intereses policiales. Les importa permanecer y lucrar en su cargo..

¿O acaso cree que las denuncias que se impulsan en contra de ellos son por puro gusto, o porque los denunciantes nada tienen que hacer? No señor, son reales, hay pruebas, y llegado el momento la justicia caerá. Lo único que pedimos, si hace caso omiso a este requerimiento, es que luego no diga que no fue advertido.

La Justicia Divina llegará para Pato y Cía, pero antes esta la Justicia de los Hombres.