LA GESTION DE LA POLICIA PROFESIONAL DE MARCELO PATO

Siguen sucediéndose los hechos delictivos en el ámbito provincial, y muchos de ellos potenciados por la ineptitud (o falta de ganas) de los integrantes de las distintas dependencias policiales. Estos hechos se repiten prácticamente a cualquier hora del día, y no discriminan ni en género ni en edad, en cuanto a sus damnificados.

Son más notorios en las ciudades Capital y Banda, donde los punteros políticos, actuales jefes de Unidad Regional y/o comisarías, se exponen a los medios, manifestando con total desparpajo, que los operativos “han sido altamente positivos”. ¿Positivos en que? Si el índice de delitos tiene su línea en aumento, no ha decrecido su porcentaje, es más ni siquiera han sido capaces de mantener estable y evitar que evolucione esta problemática.

El jefe de policía, no apto ni a propósito para algo. Adj. Necio o incapaz. U. t. c. s.), se atrevió a sostener no hace mucho tiempo, que el índice delictivo había bajado en un 43%. ¿Qué método estadístico utiliza en sus mediciones? ¿O serán los profesionales que lo rodean los que les arman sus datos? ¿O se trata de estadísticas de otros países?

Tal vez se equivocó y se mandó a promocionar cifras de otro contexto, ya que se sabe que por su notoria incapacidad, busca en Internet programas y objetivos que se desarrollan en otras latitudes, e inclusive copia frases armadas, y las incorpora a su vocabulario. Por eso son tan aparatosos sus anuncios y conferencias, pero cuando nuestros colegas periodistas locales lo quisieron entrevistar a la mañana siguiente de la malograda usurpación de viviendas del IPVU, en el sector “Villa del Carmen”, rehusó dar explicaciones, ni siquiera los atendió. Claro, los periodistas manejaban mucha información, inclusive datos acerca de la cantidad de heridos con balas de goma como resultado de la refriega.

¿Heridos por disparos de arma de fuego? ¿Y la tan alabada policía profesional, su preparación para evitar choques con la ciudadanía? ¿Y la prevención comunitaria? Es indudable que en estas cuestiones, los ejemplos sobran para darse cuenta que lo que el pregona como policía profesional, dista mucho de lo ideal.

Debería haberse preparado un sistema preventivo, basado en los informes preliminares de las dependencias encargadas de “filtrar” información, para evitar una situación como la acontecida, con mujeres y niños, expuestos a la balacera y a las agresiones del personal policial, que dicho sea de paso, solo cumple órdenes de sus inoperantes jefes.

Pero claro, estos informes esperados son inexistentes, ya que las referidas dependencias, llámese inteligencia Criminal (D-2), por ejemplo, no están enterados de estas situaciones ya que su actuación del momento está orientada a vigilar a personas que pertenecen a la oposición política del gobierno. Pero ojo, eso no es todo, porque Pato y Cía., también encomiendan seguimientos a gente que pertenece al mismo gobierno, inclusive al mismo personal policial que no sigue sus lineamientos. Policías que investigan a policías, cual guerra fría” autóctona, al mejor estilo de las famosas mafias policiales. Increíble, pero cierto.

No hay delitos dice Pato, porque mi policía profesional esta trabajando en prevención. Preguntemos a los damnificados a ver que opinan de estas apreciaciones. ¿Qué dirá el Sr. Saad dueño de la pinturería en La Banda, que ayer fue robado a mano armada por un valor de aproximadamente $13.000, o la empleada de la empresa constructora que también fuera víctima del robo de otra cifra importante. Téngase presente que solo mencionamos, al pasar, dos hechos ilícitos, de los tantos que se registran.

Estos dos, fueron en La Banda y Capital respectivamente, ambos en pleno centro. ¿Y el operativo “saturación”?

Basta con la perogrullada, la ineficiencia del personal, ineficiencia que surge de la falta de preparación física y mental, está marcada además por la falta de control de quienes deberían andar controlando en la calle, y no sentados en sus despachos tomando mate con las agentes devenidas en secretarias privadas.

No seamos necios, ni pretendamos un control de estos inoperantes, y eso el personal subalterno los sabe de memoria por eso, como dice la barra, “ni se calienta”.

Decía un efectivo del otrora Departamento Operaciones Policiales D-3, hoy oficina recaudadora de adicionales: “mira si rulo Ibáñez me va a decir que hacer”,Fabio Juárez”. Textual.

Fabio Juárez, con la carga de antecedentes que tiene en sus espaldas, es comisionado como representante de la policía a participar en algunas reuniones con representantes de las fuerzas vivas, como lo vimos el otro día por el tema “boliches” o “picadas”. (No recordamos en cual reunión que participó).

Participar, solo eso, porque opinar no creo. ¿Sabrán eso los otros representantes?

Pero ahí va este señor, diciendo que es comisario. Siempre se acomodó en lugares cómodos. Su paso por Sustracción de Automotores ya marcó una sensación de que era manguero, y por eso lo corrieron de ahí. Tuvo un único y fugaz paso por comisaría, (9na) donde según comentan era chupamedias del jefe, pero inoperante al fin, desde ahí fue al DIC, donde pulió su perfil de persona, un verdadero ca...... Y ahora en el D-3, en Convenio Policial.

Y le encanta andar en helicóptero, eso si. Un chico con juguete nuevo pensar que se quejaban de “Chelko” Suárez. Ese por lo menos es andariego, le gusta la calle. También se manda cada macana, pero es parte de su personalidad.

En esta resumida cuenta, porque son muchos los oficiales superiores y oficiales jefes que se podrían mencionar, como mal ejemplo de esta pérfida situación institucional. Pero para muestra basta un botón.

Son los que llevan adelante la policía profesional, sinónimo de eficiencia y versatilidad, seguro ciudadano contra el riesgo de ser víctima de un delito, la policía profesional de Pato.

Pero tenemos una buena noticia, entre tantas pálidas. Ya le levantaron el “estado de disponibilidad” al oficial de policía esposo de la agente perteneciente a Comisaría Quinta. Luego de la nota publica en nuestro medio, el subjefe de policía Omar Quiroga, le cumplió la promesa a la femenina y ya esta de nuevo trabajando, haciendo pasillo en la Unidad Regional Nº 1, pero ya trabajando que es lo importante.

Y con ello queda claro que por ciertos “favoritismos”, por no decir “favores”, se ha solucionado una situación que tuvo su origen en un grave incidente, dentro de una dependencia policial. Mientras que en otros casos, por una simple falta, el personal “sin fueros” es suspendido, sumariado, y trasladado, como ejemplo de una gestión transparente, de incorruptibles.

Sr. Gobernador de Santiago del Estero, la situación es insostenible ya, no permita que se torne irreversible, porque hacia ese camino vamos. Los nichos de corrupción son tan grandes que la única forma de erradicarlos es cambiar jefatura, subjefatura y plana mayor policial. Ahora es el momento, luego, creo que será demasiado tarde.

Tal vez se vayan estos innombrables, pero vaya que hicieron escuela. Van dejando elementos que serán una réplica de su accionar, y mañana serán jefes. Una lástima que por tan pocos, toda una institución fenezca. Creo que los policías merecen otra oportunidad, pero dentro de un ambiente sano, como corresponde a cualquier contexto laboral. Y no como lo que esta pasando ahora, nunca visto en la historia de nuestra provincia.