LOS CORRUPTOS |
La concertación nacional ideada por el ex presidente Kirchner "sigue viva" afirmo Zamora a los medios locales. Para un observador de la realidad política sus expresiones parecen salidas de un contexto histórico distinto a juzgar por los acontecimientos que día a día suceden en la vorágine política.
La grave crisis que sufre la concertación al presente, era impensada hace un año atrás por su ideólogo; "EL" ( como suele llamarlo su viuda ) jamás imagino un Santa Fé - Córdoba - La Pampa enfrentados al gobierno nacional, menos aún, las duras criticas y la indisimulada "fuga" dirigencial. Gerardo Zamora, es el único político extrapartidario que mantiene a rajatabla y de rodillas sometido a los caprichos del gobierno central. Sin autonomía, sin autodeterminación, Julio De Vido nos administra como a una sucursal del Ministerio de Planificación.
El brazo intelectual del Kirchnerismo (Carta Abierta) advierten de la decadencia en la cual está inmerso, lo que algunos denominan "modelo" y vaticinan su inevitable desaparición. La corruptela demostrada en figuras emblemáticas del sector (Hebe de Bonafini) y los múltiples hechos de corrupción logrados bajo excusa de los falsos ideales (Derechos Humanos) hoy parecen haber agotado a la sociedad toda.
Es entendible en el contexto provincial lo manifestado por Zamora. Que otra cosa podemos esperar de quien se dice político y no posee identidad partidaria que lo sustente. No es radical ni peronista. Es en verdad, un acomodadizo de las circunstancias. Hoy, sabe el gobernador el escenario es otro, conseguir votos para calmar a Cristina para las presidenciales que se avecinan, no es tarea fácil. Dos figuras fuertes emergen del radicalismo y el peronismo, Ricardo Alfonsín y Eduardo Duhalde, que hoy concitan interés entre sus partidarios, situación totalmente distinta a lo sucedido en el 2007. Y, Zamora está preocupado. La fuga de sus ex correligionarios es algo inevitable. De allí su necesidad de justificar lo injustificable, del mismo modo que Daniel Filmus festejo la derrota ante el abrumador triunfo de Mauricio Macri; Zamora nos muestra su imagen fuerte para ocultar su más que evidente decadencia personal y política.
Pero lo que preocupa mayormente a Gerardo Zamora es su futuro político, los resultados negativos que han traído sus delfines del gobierno, cuando de hurtadillas procuraron vanamente un acercamiento a los dirigentes de Ricardo y el Duhaldismo. Ambos sectores han rechazados los aportes económicos ofrecidos para solventar gastos de campaña. Ninguno de los presidenciables quiere vínculo o compromiso alguno con el actual gobernante. Saben de las graves corrupciones que comparte con los funcionarios de la nación, la obra publico es lo más escandaloso.
La grave crisis que sufre la concertación al presente, era impensada hace un año atrás por su ideólogo; "EL" ( como suele llamarlo su viuda ) jamás imagino un Santa Fé - Córdoba - La Pampa enfrentados al gobierno nacional, menos aún, las duras criticas y la indisimulada "fuga" dirigencial. Gerardo Zamora, es el único político extrapartidario que mantiene a rajatabla y de rodillas sometido a los caprichos del gobierno central. Sin autonomía, sin autodeterminación, Julio De Vido nos administra como a una sucursal del Ministerio de Planificación.
El brazo intelectual del Kirchnerismo (Carta Abierta) advierten de la decadencia en la cual está inmerso, lo que algunos denominan "modelo" y vaticinan su inevitable desaparición. La corruptela demostrada en figuras emblemáticas del sector (Hebe de Bonafini) y los múltiples hechos de corrupción logrados bajo excusa de los falsos ideales (Derechos Humanos) hoy parecen haber agotado a la sociedad toda.
Es entendible en el contexto provincial lo manifestado por Zamora. Que otra cosa podemos esperar de quien se dice político y no posee identidad partidaria que lo sustente. No es radical ni peronista. Es en verdad, un acomodadizo de las circunstancias. Hoy, sabe el gobernador el escenario es otro, conseguir votos para calmar a Cristina para las presidenciales que se avecinan, no es tarea fácil. Dos figuras fuertes emergen del radicalismo y el peronismo, Ricardo Alfonsín y Eduardo Duhalde, que hoy concitan interés entre sus partidarios, situación totalmente distinta a lo sucedido en el 2007. Y, Zamora está preocupado. La fuga de sus ex correligionarios es algo inevitable. De allí su necesidad de justificar lo injustificable, del mismo modo que Daniel Filmus festejo la derrota ante el abrumador triunfo de Mauricio Macri; Zamora nos muestra su imagen fuerte para ocultar su más que evidente decadencia personal y política.
Pero lo que preocupa mayormente a Gerardo Zamora es su futuro político, los resultados negativos que han traído sus delfines del gobierno, cuando de hurtadillas procuraron vanamente un acercamiento a los dirigentes de Ricardo y el Duhaldismo. Ambos sectores han rechazados los aportes económicos ofrecidos para solventar gastos de campaña. Ninguno de los presidenciables quiere vínculo o compromiso alguno con el actual gobernante. Saben de las graves corrupciones que comparte con los funcionarios de la nación, la obra publico es lo más escandaloso.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Los comentarios publicados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de sanciones legales. Aquel usuario que incluya en sus mensajes algun comentario violatorio del reglamento sera eliminado e inhabilitado para volver a comentar. Enviar un comentario implica la aceptacion del Reglamento.