Ante el avance notorio de la inseguridad en nuestra provincia, las fuerzas policiales se encuentran en su mejor momento. Claro que ello no obedece a este fenómeno en sí mismo, sino a la impecable gestión que llevan adelante Marcelo Pato y Omar Quiroga, dos intelectuales que descollaron en la vida policial y son hoy los responsables del cambio.
Hay que reconocerles eso, pues los cambios que produjeron son únicos no solo en el país, sino en el mundo. Imagínense los lectores que el Plan Estratégico Operacional de Seguridad fue conocido y reconocido en otros países, y que la fuerza militarizada más importante del mundo, de Israel, solicitó al Gobernador Zamora el envío de este gran estratega, émulo de Alejandro Magno, a exponer el año pasado en ese lejano país. Desde la visita de Marcelo Pato a Israel, los diarios no publican más hechos de violencia ni atentados en ese país, incluso suponen los miembros consejeros de la ONU que en el breve plazo se terminarán definitivamente las hostilidades entre Palestina e Israel, pues las milicias rebeldes palestinas supieron de la visita de Pato a sus históricos enemigos y no quieren arriesgarse más.
Ya en el plano local, se llegó a suponer, y esta información ya está en manos del juez de la causa "Banco Credicoop", Dr. Tarchini Saavedra, que el robo cometido en esta entidad bancaria fue permitido a propósito para que las fuerzas policías y sus cuerpos especiales entraran en acción.
Recordemos que las guerras existen para financiar la venta de armas y las pruebas de nuevos y más sofisticados armamentos y estrategias de combate. Entonces, en menor medida lógicamente, Marcelo Pato, ordenó al personal de ETM que se replegara, así los delincuentes pudieran actuar. La idea era, una vez estos adentro del Banco, que el Cuerpo de Negociadores comenzara las tratativas para recuperar los rehenes. En segunda instancia y en caso de no obtener resultados positivos, entraría en acción el GETOAR (creado por Marcelo Pato), para mostrar sus habilidades. Según estimaciones realizadas por personal policial conocedor del tema, sus integrantes tienen una preparación mucho más exigente que el propio BOPE, de Brasil. Espectacular.
Si hubiese sucedido un incendio o amenaza de bomba, aparecería en escena personal de la División Bomberos a cargo del Comisario Inspector Gustavo Castillo, que ya terminó su curso de explosivos y agresivos químicos vía internet. Claro, era muy peligroso hacerlo de manera presencial. Vale igual.
Y allí entraría en escena la más impresionante obra del personal de la Policía en la última década. Un proyecto sólo imaginado por Marcelo Pato, y desarrollado por personal profesional perteneciente al área Informática de Jefatura de Policía. Todos estaban expectantes con la aparición de uno de los dos robots, Lorenzo o Santiaguito. Obra excelsa del jefe de policía.
Todo iba a depender del estado de situación generado en el interior del banco. Si era una granada o similar, entraba Santiaguito, por su tamaño y operatividad. Si se trataba de un artefacto más potente, o un arma poderosa cuya desactivación fuera mecanizada o con un dispositivo sofisticado, se dispondría el accionar de Lorenzo, un modelo avanzado similar al utilizado por la NASA en el último ensamble de celdas solares que hicieron en órbita en la plataforma espacial.
A pesar de lo fallido del procedimiento, hay que hacer notar como funcionó la cadena de mandos policiales, la premura con que se resolvió el caso, y la detención de los maleantes, lo cual se publicó en todos los medios, como habrán podido apreciar nuestros estimados lectores.
No obstante este pequeño desliz, que seguramente no volverá a suceder dado el profesionalismo de la policía actual, la ciudadanía sabe ahora que cuenta con estos adelantos tecnológicos que ayudarán a la resolución de cualquier conflicto, aún las contravenciones.
Por ejemplo, un vecino desaprensivo escucha música a alto volumen molestando a sus pares. Ante la denuncia, y la falta de acatamiento de la orden policial de cesar la falta, se mandaría al robot para que ingrese al domicilio. No necesita orden de allanamiento ni nada, se acercaría al equipo musical, y como posee un sistema informático que le permite evaluar los decibeles que se está propalando, con su brazo inteligente, bajaría el volumen al máximo permitido. O sea, sería un procedimiento de aprovechamiento de recursos tecnológicos, sin el ejercicio de la fuerza policial, sin riesgo para policías ni contraventores.
Ejemplos de esos podemos dar muchos, pero lo dejamos a su imaginación.
Por si cabe alguna duda, les dejamos unas fotos que muestran palmariamente los avances tecnológicos de nuestra policía, gracias al erudito Marcelo Pato. Congratulaciones.
En este artículo sarcástico, quisimos reflejar la alta innoperancia policial de la actual plana mayor, por idea del jefe de policia Pato crearon este robot y nunca lo pudieron hacer funcionar con el fin previsto, cuando fue anunciado a los cuatro vientos en la semana policial por el mismo Pato. Como conclusion, absolutamente ninguna estrategia implementada funciona, como tampoco las camaras domos que se implementaron en el casco centrico.En breve presentaremos un informe especial y los defectos de su implementacion.
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