Cotidianamente vemos protestas de la SIP (Sociedad Interamericana de Prensa) y ADEPA (Asociación de Diarios y Periódicos de Argentina) por la "falta de Libertad de Prensa en Cuba, Venezuela y Argentina. Pero, ¿cuándo hemos visto que estos organismos de monitoreo digan una sola palabra sobre la absoluta falta de libertad de prensa en Santiago del Estero?
Esta situación es, para los santiagueños, un grave problema. Que pone a la sociedad y a las instituciones bajo los designios de pequeños grupos, enquistados en el gobierno. Ellos disponen lo que los ciudadanos van a saber o no. Y de esa manera suspenden de hecho las garantías democráticas, colocando a toda nuestra sociedad bajo una dictadura virtual.
¿Informan realmente los medios de comunicación en Santiago del Estero? Todos sabemos que algo informan. Pero también que la información proporcionada es incompleta. Y cuando la información es incompleta, el servicio no sirve. Sería como si tuviéramos un teléfono desde donde se puede llamar a ciertos números y a otros no.
Los medios santiagueños informan sobre los supuestos éxitos del gobierno, sobre las andanzas de actrices o modelos, sobre crímenes individuales o accidentes de tránsito. Pero no sobre el manejo de la economía o numerosos asuntos políticos, de interés público indudable, que la población debería al menos conocer. Tampoco informan siquiera sobre hechos policiales, cuando estos involucran a los "amigos del poder".
Y cuando algún político o ciudadano honesto intenta recurrir a ellos, con el sano propósito de ejercer sus derechos democráticos, inmediatamente es borrado de la sociedad por estos medios. Y le es negada la posibilidad de compartir con sus conciudadanos datos o conocimientos de gran injerencia sobre el destino de toda la comunidad. E incluso al contar el Gobierno Provincial con el manejo arbitrario de gran parte de la Justicia Santiagueña, termina el denunciante sometido a Juicio e incluso condenado, como el caso de quién les escribe, a lo que se suma la difamación de los medios pagos por el gobierno, para mostrar una cuestión de interés público como una asunto personal, de una persona, que sólo habla y se expresa por cuestiones puramente particulares y no por velar interés públicos.
En resumidas cuentas, podemos decir que en Santiago del Estero, pues, no hay libertad de prensa. Menos, libertad de expresión. Dado que desde el año 2005 hasta hoy, los diarios, revistas, radios y televisión, publican únicamente lo que favorece al gobierno provincial.
Debido a ello, hemos creado un medio de internet, inicialmente nacido con el propósito de denunciar al Régimen corrupto, se fue convirtiendo realmente en un genuino canal informativo. Sin trabas ni condicionamientos, donde nuestros lectores pueden encontrar la verdad de lo que ocurre diariamente en Santiago del Estero.
Construyamos entre todos la prensa independiente que necesita nuestra provincia, para estar verdaderamente informados. Y así, poder decidir
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