Insólitamente, el Cabo de Policía Infante Yanivelli fue pasado a disponibilidad preventiva, situación dispuesta por el jefe de policía Marcelo Pato, ante un pedido de la Prof. Mirta Giménez, Directora de Gestión de la Gobernación. La primera pregunta que surge es ¿qué tiene que ver ella con la policía? Segundo ¿Un jefe de policía puede recibir y acatar este tipo de "órdenes"? No dijo Zamora en tantas oportunidades que la policía no tiene relación con la política?
Debería haber sabido el inoperante Pato, que "Peticionar a las autoridades " es un derecho constitucional, y por tal motivo, instaurado en la Ley Suprema de la Nación Argentina. Además, el tema de una vivienda digna nada tiene que ver con la policía, ya que Uds., inoperantes de la plana mayor, no consiguen que el IPVU les asignen una vivienda para destacamentos en los barrios más alejados, menos se van a preocupar por la vivienda de sus subalternos.
Este hombre, a quien no se le conoce nada irregular en su carrera policial, distinta a Uds. Inútiles. Ahora se lo ve no solo privado de una vivienda digna, sino que ahora tampoco tiene trabajo. Lo más preciado para el hombre es eso, su trabajo, pues con ello sostiene a su familia y educa a sus hijos.
Debemos recordar que este muchacho, hoy suboficial de la policía, durante años prestó servicios ad honorem en el Grupo Especial de Rescate, yendo a trabajar a la par de los policías, internándose en el monte, haciendo rescates, arriesgando su vida a la par de sus compañeros. O sea, durante años demostró las ganas de ser policía, hasta que logró su propósito.
La verdad, al tomar conocimiento de su situación nos dejan sin palabras. Queremos saber donde está el delito, la falta, la infracción o como le quieran llamar, para poner en situación de disponibilidad a este empleado policial.
Debemos recordarles, a todos, que por causas graves y gravísimas, delitos en sí mismos, hoy muchos malos funcionarios policiales siguen trabajando como si tal cosa, pero claro, amparados por Marcelo Pato y Omar Quiroga, únicos responsables de la generalizada corrupción que hoy se ve. Mientras tanto, los delitos se suceden a toda hora y no hay forma de parar el problema.
Estos vulgares especímenes, en lugar de abocarse a presentar una política de seguridad para que los ciudadanos se sientan seguros, se dedican a inventar cargos para perjudicar de cualquier manera al personal.
Y en esa línea podemos mencionar al Subcomisario Laureano Silva, amigo personal de Pato, quien desde su cargo en Sanidad Policial, presiona al personal que concurre enfermo para evitar que estos usufructúen licencia médica. ¿Cuándo se recibió de médico este inútil acosador de cadetes femeninos? Mientras tanto, vive y come en la escuela de policía, a costillas del Estado, que le paga vivienda mientras ni siquiera paga un alquiler, comiendo mejor que nadie. Es una forma de pago por los favores que este señor le hizo al más inútil de Marcelo Pato. Pero no, a éste zángano nadie lo controla, nadie lo investiga, nadie lo pone en disponibilidad, a pesar de las calamidades que realiza.
¿Y quieren otro ejemplo de lo que exponemos? Vamos a hablar de un policía profesional ahora, de esos encumbrados que Pato alienta, y que perviven gracias a que les encanta ser lame botas (por no decir otra cosa)
El día del robo al Banco Credicoop, además del policía en el castillete, se encontraba otro profesional de la era Pato. Y cuando entraron los delincuentes, fue el primero que recordó "cuerpo a tierra y buscar cubierta", frase hecha que los oficiales de escuela, los de antes, recuerdan?.
Ninguno de los clientes hizo eso, se quedaron parados en sus lugares hasta que el delincuente entró, rompió el vidrio, de la caja, sacó el dinero, y se marchó con sus cómplices. Mientras ellos ocurría, este sub comisario que se dice profesional, permaneció en el suelo en posición decúbito lateral, tal como se puede ver en las imágenes. O sea, no lo puede desmentir ni inventar otra versión de los hechos, por que los registros de las cámaras lo muestran.
Otra cosa, luego de que pasó todo, el muy miedoso, por no usar un término vulgar, se levantó, tomó su casco y displicentemente salió caminando por calle Avellaneda hacia 24 de septiembre, tal como se ve en las fotografías. Ni siquiera fue capaz de llamar al 911, o tratar de seguir e identificar a los autores del robo, nada. Simplemente se fue, seguramente buscando el baño de algún bar o galería céntrica.
El tipo, viendo de frente la entrada, tenía tiempo de avisar al policía en el castillete, parapetarse y sacar su arma ya que uno de los delincuentes , recién saco la pistola, luego de saltar la caja . Eso hubiera sido suficiente para disuadir a los delincuentes. Pero no, prevaleció su status de profesor de historia y no su condición de policía, se acostó en el suelo permitiendo que los malhechores actúen con total tranquilidad por 4 minutos que duro el asalto. ¿Liberación de zona? ¿Quien dijo eso? Ahora comprobamos que había un policía profesional en el lugar.
Los Señores Lectores ya vieron las imágenes ¿Lo reconocen? ¿Saben quién es? Si Señores, el mismo, SUBCOMISARIO WALTER LOTO actualmente jefe interino en la Comisaría Tercera, área Unidad Regional Nº 1. El mismo que estaba a cargo de la comisaría seccional 37º de Arraga, cuando supuestamente sus subalternos golpearon al joven Pérez y dejaron abandonado en la ruta, con el fin que lo matara un vehículo y el hecho lo caratularan como homicidio culposo. Curiosamente esa noche, Loto actuaba como superior de turno por la zona sur. Como recordaran, en un artículo anterior publicamos que este mismo jefe se hacía buscar desde Arraga con el móvil policial para ir a cumplir sus funciones, es decir, el patrullero era usado como “remis”4 viajes diarios desde esa localidad hacia el barrio el Vinalar, además este jefe ordenaba que dicho móvil trasladara a su hijo 3 veces por semana desde su domicilio, hasta el club olímpico de la Banda, entre otras, a su familia que reside en el barrio 8 de Abril, mientras tanto dejaba el vehículo sin recorridos de prevención por su competencia y de asistencia a los lugareños en caso de enfermedad u otra situación. Lo llamativo era, que cuando se rompía el patrullero, este señor no asistía a la dependencia.
Una vez presentado algunos de los antecedentes, hecha la salvedad de este Jefe policial y profesional de la era Pato, volvemos al banco. Las fotos no mienten. Véanlo a este subcomisario, tirado en el piso rogando que los delincuentes no lo miren. Aún mirándote diez veces, jamás te hubieran reconocido como policía, porque un verdadero policía no hace eso.
Ahora Marcelo Pato, Omar Quiroga, Talavera, etc., todas las lacras de la plana mayor, asesores incluidos. Pongan ambos hechos en la balanza y vean a quien le corresponde estar en disponibilidad preventiva. Al suboficial que solo pidió una vivienda digna para su familia, o este oficial jefe inservible igual que ustedes, que denigró el uniforme y el ser policía. Claro, Walter Loto, es el que le prepara los discursos banales a Marcelo Pato cuando tiene que hablar en algún acto policial. Tal para cual, la misma calaña. Incluso esta situación, nos hizo recordarte a vos Pato, cuando fueron a buscar al Malevo Ferreira ¿te acuerdas? Primer tiro al aire que hizo el Malevo, vos andabas revolcándote en la tierra. A diferencia de este otro inútil no mordió el polvo.
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