Hablando de los fantasiosos proyectos del innombrable jefe de policía, secundado por su fiel escudero Quiroguita, (suena parecido a quiero-guita), debemos volver en el tiempo, hacia inicios del año pasado, cuando en alguna noche de juerga imaginó ver, en su loca fantasía, un pequeño robot. En realidad era un enano de jardín que el tipo confundió con un mecano, por el estado que presentaba.
Recordemos que eso se fue haciendo realidad (solo en sus sueños) y pensó en llevarle este mega proyecto al Ministro de Gobierno, y éste a su vez, al Sr. Gobernador. ¿Qué le habrán dicho? El tema es que parece que lo convencieron y al poco tiempo, exactamente el día 25/5/09, anunciaba a través de los medios gráficos locales la puesta en marcha de éste, su proyecto personal. Obviamente que se requieren años de preparación para alcanzar estos logros.
Recordemos algunas expresiones, reproducidas por la crónica de “Nuevo Diario”: Si bien aún están en etapa de desarrollo, ya fueron bautizados. Uno se llamará Lorenzo y el otro Santiaguito. Son de diferentes tamaños y se utilizará uno u otro de acuerdo al lugar en el que deban operar. Dotados de instrumentos de última generación, participarán en situaciones de alta peligrosidad, ponderaba el encabezamiento de la nota.
Dentro de poco, quizás, dos amables robots nos digan eso de “entrégate y no ofrezcas resistencia”.
El prototipo, de pequeñas dimensiones, en el que se probaron los componentes tomó el nombre de Santiaguito, el cual una vez concluido podría ser utilizado para ingresar a lugares donde una persona no podría hacerlo por su tamaño; y el otro, de mayor tamaño, con capacidad para levantar cargas y subir desniveles, será llamado con el nombre de Lorenzo.
Lorenzo es el primer proyecto; Santiaguito surgió después del prototipo que se utilizó para probar los accesorios como ser la cámara, micrófono, sensores de temperatura y movimiento. La Jefatura de Policía pretende que ambos sean mostrados en sociedad durante el desfile de la Semana de la Policía, entre otras apreciaciones consonantes con la ideota de Pedro Pica piedra.
Hoy, un año después de haber puesto en ridículo al Gobierno con esta quimera, nada se sabe del destino de estos elementos policiales contra el delito.
Lorenzo y Santiaguito brillan por su ausencia. Y llegará el próximo desfile y los chicos, los hijos de los policías, no tendrán la oportunidad de verlos en acción.
Pero el que también brilla por su ausencia es el jefe de Informática, Crío. Roque Gallegos, a quien parece que el jefe de policía lo maltrató un poco. El famoso prototipo no camina, no dobla, ni siquiera arranca, así que estamos como al principio, se lo escuchó vociferar a Pato. A esta altura del partido, deberían tener algo armado, pero parece que ni la forma consiguieron darle aún. Imagínense los lectores, si después de tanto tiempo no hicieron nada, cuanto tiempo más pasará para que sea operado desde una computadora. En verdad es un sueño que salió de la cabeza del licenciado en Gestión de Organizaciones Policiales Marcelo Pato.
Toda la inversión hecha en pos de este proyecto, y que el personal de Informática no haya podido alcanzar el objetivo, es una afrenta.
Dicen los que saben, que hasta llegaron a convocar a un par de mecánicos del Taller de Policía, a ver si por lo menos le daban alguna alternativa más viable.
Che ¿Y todos los profesionales, ingenieros, informáticos, y traviesos que metió en la jefatura? No han podido dar en la tecla aún, o en el chip.
Desde esta humilde vía de libre expresión se les siguiere a estos nobles profesionales reunirse de madrugada con el jefe de policía, tomarse un alcoholcito y varios míorelajantes, a ver si se duermen y juntos sueñan lo mismo, porque hasta ahora no han sintonizado las pretensiones del jefe de policía. Y a vos Pato, si sigues en el cargo, trata de incorporar la materia "Robótica I" en la Diplomatura en Gestión de la Organizaciones Policiales, total, todo es un cambalache.
El caso es que Marcelo Pato, y sus ideas ilusorias han llevado al hartazgo de la sociedad, y ni hablar del personal policial en general. ¿Hasta cuando piensan seguir con esta farsa? ¿No se dan cuenta, Sr. Gobernador, Sr. Ministro, que esto no le hace bien a nadie? Miren a su alrededor, cerca de ustedes hay gente mucho más capacitada, y honesta, que puede hacer una excelente gestión al frente de la jefatura de policía. Piénsenlo.
Hechos como el narrado, muestran a las claras la inoperancia, la negligencia y la falta de responsabilidad, pero sobre todo la desvergüenza que empapa a estos personajes, nefastos como no hubo otros, jamás en la historia institucional de la policía.
El jefe de Informática tuvo más de un año para preparar este prototipo, que terminó solo en su traslado, y el de varios de sus subalternos seguramente, porque es notorio que no tienen, ninguno, el grado de preparación superior y específica en la materia.
Dejen de robar y de mentir de una vez. Parece que mantenerse en el cargo es porque alguien del gobierno, se estima que es el Ministro Neder, lo mantiene en el cargo por las favores realizados. Es un servil útil a los fines espurios de otros, ya que nunca actuó, tampoco Quiroga lo hizo, a favor del personal ni de la institución.
Servil, pues sirve a otros. Pero si descomponemos la palabra “SER-VIL” vemos que también cabe esta acepción, pues es un ser vil, indigno del cargo que detenta.
Sr. Gobernador, Ud. tiene la decisión en sus manos. ¿Necesita más pruebas?
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